Cliente interno
El personal de la empresa es contado como cliente interno, ya que es el receptor primario de la visión, misión, estrategias y acciones planteadas por la Ingeniería de Servicios para crear valor y ofrecer un buen servicio al cliente externo.
En consecuencia cada individuo dentro de la organización debe estar plenamente convencido de lo que recibe, es decir, de las acciones que le corresponde llevar a cabo ya que están dirigidas a cristalizar la visión y misión de servicio, de manera que él proporcione un servicio de calidad al cliente externo, porque así lo siente y vive. Es simplemente confirmar el viejo refrán de que «sólo se da lo que se tiene».
Visto en otro orden, cada empleado dentro de una organización también se convierte en un cliente interno conforme recibe un insumo – información, tarea, etc. – de un empleado; a su vez él se convierte en proveedor de otro u otros «clientes internos», hasta llegar al umbral donde surgen los clientes externos, en quienes se hará realidad la calidad del servicio, como reflejo de la cultura organizacional que están viviendo los clientes internos.
La importancia de los clientes internos para consolidar las acciones propuesta por la Ingeniería de Servicios, resalta la importancia de la organización orientada hacia el cliente que es el marco propio del tema.
Fuente: Apuntes de Empresas computacionales del Instituto Tecnológico de Apizaco