Memoria en el aprendizaje

¿Cómo aprendemos los seres humanos? ¿En dónde ocurre el aprendizaje? Seguramente, ante tales preguntas, podríamos decir que el aprendizaje ocurre como resultado de una modificación en la memoria, y por lo tanto habría la necesidad de definir qué es la memoria y cuáles son sus mecanismos de acción. En este segmento nos centraremos en distinguir el modelo tradicional de memoria del modelo de memoria dinámica, desarrollado por Roger Schank (1995).

El modelo tradicional del funcionamiento de la memoria humana se comprende mejor analogándola con una bodega. El conocimiento es como un conjunto de objetos que se guardan ahí para tomarlos cuando los necesitemos. Esta concepción de memoria iría acorde con la repetición de datos como medio de almacenamiento, y asumiría que, dado que los datos están guardados, pueden ser recordados en cualquier momento.

Un modelo que explica mejor el funcionamiento de la memoria es el que Schank(1982) llama memoria dinámica. Este autor considera que la memoria consiste en un conjunto de estructuras de conocimiento que determinan qué nueva información vale la pena integrar y que son responsables del procesamiento de cualquier dato nuevo.

La noción de memoria dinámica implica que las estructuras de datos no están ahí para ser utilizadas por otros procesos, superiores sino que cada estructura genera expectativas ante la nueva información, la revisa para ver si cumple con las expectativas, si las cumple se asimila al sistema, si no las cumple la estructura se acomoda y cambia actualizando el conocimiento existente. Resumiendo, la memoria cambia cada vez que se usa. En la memoria reside el conocimiento, pero también es el lugar donde se procesa el conocimiento cambiando dinámicamente lo que sabemos al procesar nueva información.

El modelo de memoria dinámica asume que la memoria está organizada a base de significados y, por lo tanto, que es el conocimiento mismo el que le da el orden a la memoria. El conocimiento nuevo debe perturbar al sistema para encontrar un lugar en relación con lo que ya está ahí. La nueva información, ¿amplía o contradice el conocimiento previo? La mente necesita resolver estas preguntas cada vez que ocurre una nueva experiencia. Por lo tanto, el proceso de recordar la información que ya se tiene almacenada y la comparación de ésta con la información nueva, es crítico en el aprendizaje

Dado que el pensamiento depende de nuestra habilidad para generalizar y unir nuestros conocimientos con recuerdos previos, la enseñanza debe hacer uso de estos procesos naturales, si es que deseamos tener éxito en nuestra actividad docente. 

Autor: Luis Felipe Gómez: Coordinador de la Especialidad en Educación Cognoscitiva y profesor numerario del ITESO.