Agua y desperdicios
Generalmente hay que eliminar las partículas grandes antes de que las aguas de desperdicio de la fábrica se envíen a la planta purificadora o que se desechen.
Muchas plantas no aceptan sólidos más allá de un cierto tamaño porque contribuyen considerablemente a la carga de contaminación, y es fácil que por su causa se exceda la capacidad de la planta. Se prohíbe igualmente la descarga de los sólidos flotantes a muchos ríos y lagos, debido a su alta potencialidad contaminadora y su apariencia antiestética.
La trituración para reducir su tamaño no es una solución. Empero, suele resultar fácil extraer estos materiales en la fábrica de alimentos y tratarlos por separado, operación que se describirá más adelante.
Aun después de la separación de partículas grandes, es posible que las impurezas coloidales y disueltas constituyan una carga de contaminación en las aguas de desperdicio en exceso de la que se acepta en muchas plantas municipales para el tratamiento de aguas de drenaje o que se permite descargar a los ríos, de modo que a menudo se requiere tratamiento adicional en la fábrica alimentaria.
Fuente: Apuntes de Taller de Frutas y Hortalizas de la UNIDEG