Determinación del costo de ventas
Tengamos presente, en primer lugar, que las empresas se dedican a comprar mercancías para luego venderlas y no para almacenarlas eternamente, ni para especular con ellas.
Al iniciar el ejercicio, la entidad posee mercancías de su propiedad, mismas que técnicamente denominamos inventario inicial.
Supongamos que su inventario inicial se compone de 1000 unidades con un costo de $1, por lo tanto, éste importa $1000
Durante el ejercicio, adquiere 4000 unidades, con un costo unitario de $1; estos $4000 representan las compras netas, suponiendo que no existieron gastos sobre compra, ni devoluciones o rebajas sobre compra. Ahora bien, estas compras netas de $4000 sumando el inventario inicial de $1000 nos da como resultado las mercancías disponibles para la venta de $5000, es decir, durante el ejercicio, se pudieron vender 5000 unidades de mercancías.
Al finalizar el ejercicio, después del practicar el recuento físico del inventario, resultó que aún tenía en existencia 2000 unidades, esta existencia como ya sabemos es el inventario final.
Lógicamente, si durante el ejercicio teníamos mercancías disponibles para la venta por 5000 unidades y al finalizar se conservaban 2000, las otras 3000 unidades corresponden a las mercancías vendidas.
Al salir del almacén, salen a precio de costo, por lo que técnicamente las denominamos como costo de ventas; o sea, las mercancías vendidas registradas a precios de costo.
Fuente: Apuntes de Contabilidad II de la Unideg