La Función del diseño gráfico y la inserción en el habitad
El diseñador como el arquitecto es un constructor de mundos, de realidades que se transforman en objetos, imágenes, sistemas y modos de vida. Tiene por lo tanto una gran responsabilidad social y ética respecto a su trabajo y su realidad inmediata. En un futuro que se construye a cada minuto, la responsabilidad individual se pierde en un contexto global, ya que hoy por hoy el diseñador carece de identidad.
Una de las bases del diseño es la producción de objetos que de alguna manera reflejan la realidad y contexto social, cultural o económico del país en donde son producidos, siendo estos objetos – por lo menos a nivel teórico – coherentes con su consumidor final local. Pero ahora en donde ya no existen fronteras geográficas y el mundo se divide en bloques económicos, el producto diseñado en Europa se produce y vende en Asia, por ejemplo, y la responsabilidad del diseñador se diluye ya que pierde su identidad y el producto acaba siendo vendido en otros paises de realidades distintas.
Este comercio global permite que los bloques económicos puedan vender entre ellos todo tipo de producto, incluidos enormes volúmenes de productos-basura, fomentando de manera absurda la producción inútil y el consumismo. La apertura de mercados gigantescos ha orientado la comercialización a niveles macroeconómicos; todo se traduce en la actualidad a estadísticas, ganancias y pérdidas financieras. El ser humano, antes provocador de revoluciones, principio y final de acciones creadoras, ha perdido su lugar protagónico frente a laglobalización.
Con relación al diseño, debe generarse una revolución preocupada con el ciclo de vida de los objetos, donde se estudie desde la materia prima hasta el objeto en desuso, incluyendo el reciclaje de materiales, uso de materiales no nocivos y procesos limpios que no afecten al medio ambiente. Reciclar obliga a la “invención” y a la búsqueda de nuevas tecnologías y procesos, en los que lo ya existente debe sufrir adaptaciones, invitando al diseñador comprometido a cambiar y direccionar su trabajo hacia nuevas soluciones que lo lleven al diseño sustentable y el eco diseño.
Dentro de este panorama, el diseñador ha de reflexionar sobre su papel para ser él mismo un agente del cambio, ya que no debe continuar ejerciendo su profesión como un contaminador que participe de la destrucción de recursos naturales no renovables. El diseñador debe replantearse la función de cada objeto, considerando que a todas sus acciones actuales originarán reacciones determinadas, a pesar de que dichas reacciones no sean visibles o perceptibles de forma inmediata. Y las consecuencias repercuten casi siempre en el terreno social.
El ser humano es capaz de dar lugar a cambios vertiginosos. La naturaleza en cambio, no tiene esa capacidad de regeneración o la misma velocidad de reproducción y crecimiento que el mundo artificial.
Fuente: Problemáticas del diseño gráfico de la Universidad de Londres