Respuesta a la reanimación del recién nacido
Signos de una reanimación exitosa son:
– Rápida recuperación de la frecuencia cardíaca sobre 100/min.
– Inicio de la respiración espontánea.
– Mejoría del color. Desaparece cianosis central.
En la recuperación de estos parámetros influye la intensidad y duración de la hipoxia. El inicio de la respiración espontánea es inversamente proporcional a la duración de la hipoxia,
Respuesta no es satisfactoria: Esta se considera como tal fundamentalmente cuando la frecuencia cardíaca se mantiene baja. También en los casos en que estando esta satisfactoria, el niño se mantiene pálido y cianótico, flácido y sin retomar la respiración espontánea. En estos caso se debe considerar lo siguiente:
– Siempre revisar técnica de reanimación: Algunos puntos claves: Que ventilación sea efectiva por el movimiento del tórax. Si está intubado, verificar que tubo está en la tráquea en buena posición.
– Técnica del masaje cardíaco adecuada.
– Presencia de Shock hipovolémico o acidosis grave que requieren de corrección apropiada.
– Descartar malformaciones congénitas y neumotórax: Hernia diafragmática e hipoplasia pulmonar son las más frecuentes. El neumotórax ocurre con frecuencia en estas patologías pero puede ocurrir en cualquier caso en que se usa ventilación con presión positiva.
– Por último hay casos, creemos que los menos, en que se trata de una asfixia grave y prolongada que no responde a una buena reanimación
El resultado de una buena reanimación es consecuencia de la acción coordinada de un equipo humano con responsabilidades y asignación bien definida. La persona que realiza la reanimación requiere de un entrenamiento actualizado para realizar los procedimientos oportuna y eficazmente.
Fuente: Manual de pediatría por el Dr. Javier Cifuentes R. y Dr. Patricio Ventura-Juncá T. de la escuela.med.puc.cl