Caulinar
El tallo es el eje de la parte aérea de las cormófitas y es el órgano que sostiene a las hojas, flores y frutos.
Sus funciones principales son las de sostén y de transporte de fotosintatos(carbohidratos y otros compuestos que se producen durante la fotosíntesis) entre las raíces y las hojas.
El sistema caulinar está compuesto por rizomas y por tallos.
Los rizomas, que corresponden a tallos modificados que nacen alternadamente desde subnudos ubicados en los tallos, presentan un crecimiento horizontal bajo la superficie del suelo.
Cada rizoma, en tanto, a través de un engrosamiento en su extremo distal, genera un tubérculo.
Los tallos, que se originan a partir de yemas presentes en el tubérculo semilla, son herbáceos, suculentos y pueden alcanzar de 0,6 a 1,0 m de longitud; además, son de sección angular y de color verde, aunque excepcionalmente pueden presentar un color rojo purpúreo.
El tiempo que transcurre entre la plantación y la emergencia de las plantas es muy variable, dependiendo fundamentalmente de la temperatura del suelo y de la calidad y tamaño del tubérculo; en este sentido, en plantaciones realizadas a fines de invierno en la zona central de Chile, la emergencia de los tallos puede llegar a demorar 35 o más días, en tanto que en plantaciones hechas a fines de primavera o comienzos de verano, la emergencia puede tardar tan sólo 20 días.
Cada planta, en el contexto de un cultivo, produce normalmente dos a cuatro tallos, dependiendo fundamentalmente de la calidad del tubérculo semilla; estos tallos pueden originar ramificaciones secundarias a partir de yemas ubicadas en las axilas de las hojas.
Cada tallo, a su vez, produce en promedio tres a cuatro rizomas, con un máximo no superior a ocho.
Los tallos pueden ser erectos o decumbentes, siendo lo normal que vayan inclinándose progresivamente hacia el suelo en la medida que avanza la madurez de los tubérculos.
En la etapa final del desarrollo de las plantas, los tallos pueden tornarse relativamente leñosos en su parte basal.