Características y clasificación de los metazoos

La mayoría de los animales denominados metazoos se caracterizan por la presencia de una zona del cuerpo, la cabeza, en la que se agrupan los centros nerviosos y los órganos de los sentidos.

El cuerpo de los animales metazoos suele presentar además una serie de apéndices: brazos, antenas, pinzas… con funciones muy diferentes, como el movimiento, la captura del alimento o la defensa ante posibles enemigos.

En ciertos grupos, como los anélidos y los artrópodos, el cuerpo aparece dividido en varias porciones o segmentos.

La forma del cuerpo de los metazoos está íntimamente relacionada con sus costumbres y modo de vida. Los peces, por ejemplo, poseen una forma hidrodinámica que les facilita la natación; los reptiles se desplazan arrastrándose con gran facilidad gracias a su forma alargada.

Los animales sésiles (fijos al suelo) o los que se mueven muy lentamente suelen ser también los más pesados y los de mayor tamaño.

Animales tan distintos como una abeja y un rinoceronte son metazoos. Ahora bien, existe una diferencia fundamental entre ellos que determina la división de los animales pluri celularés en dos categorías: vertebrados e invertebrados, según posean o no columna vertebral.

Fuente: Apuntes de la materia de Biología de la Unideg