Infrarrojo
El infrarrojo es la parte del espectro electromagnético entre la luz roja visible y las ondas milimétricas (donde comienza la región de las ondas radio). En este intervalo del Espectro electromagnético está comprendida esa radiación que genéricamente notamos como calor.
El cielo visto a través de los infrarrojos es muy diferente del que podemos observar a simple vista. La mayor parte de las estrellas más luminosas emite poco al infrarrojo; por otra parte, muchos cuerpos que son potentes fuentes de radiación infrarroja no emiten radiaciones visibles. En general un objeto que emite predominantemente en el infrarrojo es mucho más frío que nuestro Sol, que tiene una temperatura superficial de unos 6.000 grados K y, por lo tanto, no logra emitir radiaciones visibles.
La investigación del cielo a través de los infrarrojos tiene una enorme importancia para la astronomía, porque permite descubrir objetos de interés cosmológico como estrellas frías en las primeras etapas de su formación, nubes de gas a bajísima temperatura como las regiones H, moléculas y nubes de polvo interestelar.
Las observaciones sistemáticas al infrarrojo comenzaron en los años 1960. Fue en el observatorio de Mount Wilson, en California, donde fue elaborado el primer mapa del cielo a través de los infrarrojos con el descubrimiento de más de 20.000 fuentes, la mayor parte de las cuales eran estrellas con temperaturas superficiales entre 1.000 y 2.000 K.
En la práctica, cualquier telescopio corriente puede hacerse sensible al infrarrojo mediante la aplicación de células fotoeléctricas especiales a base de sulfuros, montadas en el foco primario del objetivo. Sin embargo, se han realizado telescopios astronómicos dedicados a estas investigaciones específicas, como el americano de Mauna Kea en Hawaii, que contiene el instrumento más grande del mundo especialmente apto para la investigación infrarroja: es un reflector de 386 cm.
Para este tipo de investigación es fundamental que el observatorio esté a una gran altura, por encima de las formaciones atmosféricas de vapor de agua que absorben la radiación infrarroja. La astronomía infrarroja consiste en la observación y estudio de fuentes astronómicas a partir de la radiación infrarroja que emiten.
Aunque en general se denomina infrarroja a la radiación electromagnética de longitud de onda más larga que la de la luz visible (400-700 nm) y más corta que la de la radiación de terahertzios (100-1.000 μm) o las microondas (1-1.000 mm) , en astronomía suele considerarse como infrarrojo el rango entre 1 y 1.000 micrómetros.