Maniobra de heimlich
Cuando el cuerpo extraño está impactado y la persona está consciente, le animaremos a que TOSA. Si no lo conseguimos, pasaremos a practicar la maniobra de Heimlich. Esta se practicar de diferente manera en el paciente consciente e inconsciente.
En el paciente CONSCIENTE:
Nos colocaremos detrás del paciente y rodearemos con nuestros brazos su cintura, agarraremos el puño de una mano con la otra, colocaremos ambas manos frente a su abdomen, entre el apéndice xifoides y el ombligo, y comprimiremos el puño contra el abdomen del paciente con un impulso rápido hacia arriba y hacia atrás.
Se deben repetir de 3 a 5 compresiones abdominales que consiguen aumentar la presión intratorácica y hacer que el cuerpo extraño sea expulsado.
En el paciente INCONSCIENTE:
Lo colocaremos tumbado de lado y con la palma de la mano daremos de 3 a 5 palmadas entre las escápulas. Seguidamente colocamos a la persona en decúbito supino y la practicamos de 3 a 5 compresiones abdominales.
Para ello, nos colocaremos a horcajadas encima del paciente o arrodillados a su costado, colocaremos una mano sobre la otra con el talón de la inferior en la línea media entre el ombligo y el apéndice xifoides, y, seguidamente, presionaremos hacia el diafragma con un impulso fuerte y rápido hacia arriba. Después exploraremos la boca y trataremos de extraer el cuerpo extraño si éste es visible.
Las maniobras de Heimlich, tanto en el paciente consciente como en el inconsciente, deben repetirse tantas veces como sea necesario hasta conseguir desobstruir la vía aérea.
En el caso de mujeres EMBARAZADAS y OBESOS, la maniobra de Heimlich será igual, salvo que el lugar de compresión no será el abdomen, sino el esternón a 2 o 3 dedos por encima del apéndice xifoides.
Fuente: Manual de socorrismo y primeros auxilios