Los baldosines
Una vez terminado el croquis, se obtiene fácilmente el número de baldosines necesarios juntando sistemáticamente todo baldosín interior en el contorno de la habitación o, al menos, comprendido en el contorno (figura 61).
ATENCIÓN: sobre todo no restar las juntas en el cálculo de número de baldosines, pues la superficie ocupada por estas juntas es equivalente, en número de baldosines, a la cantidad de material; que es preciso comprar en número superior en previsión de los que se rompan durante la colocación o de tamaños inferiores que a veces se observan en ciertas fabricaciones (disminuciones de 1 a 2 mm son frecuentes).
Esta observación es evidentemente válida en el caso de juntas normales de orden de 2 mm de espesor y necesita adaptación en los extremos: baldosines que se tocan o, por el contrario, juntas de 1 cm de espesor.La colocación de los baldosines no necesita ninguna herramienta particular (excepto quizás en ciertas ocasiones una cala de madera blanda y un mazo), pero sí una regla y nivel de agua.
Por el contrario, el corte de los baldosines exige un diamante de cristalero, una fina regla de madera dura y un par de tenazas; es útil una piedra de aceite para suavizar ciertos cortes. Además, puede que se tenga a veces necesidad de perforar un agujero en un baldosín para fijar una jabonera por ejemplo: en este caso es necesario un taladro y un ramplús en carburo de tungsteno (figura 62).
Fuente: Guía Práctica de fontanería de Reneé Hiller