Cortinas para Cocina
Entre los arquitectos y decoradores modernos existe una lucha de tendencias sobre el arreglo de la cocina; unos preconizan que esta debe ser resuelta con el carácter de un laboratorio, y otros que deben ser eficientes, pero mantener el espíritu acogedor de aquella cocina clásica que nuestros abuelos concebían como el lugar más cálido y hospitalario del hogar.
El primer requisito de una cocina moderna es la eficiencia en la disposición de sus elementos; estos habrán de ser agrupados convenientemente para mayor economía del espacio y dispuestos, de manera coordinada, para que dejen amplias superficies para el trabajo y faciliten el poder guardar las cosas.
Una cocina bien planeada ahorra energías, reduce las tareas del ama de casa, o del servicio, y permite más tiempo para otros trabajos, el descanso y el recreo.
La cocina que no esta dispuesta con orden crea una molesta e infinita serie de pasos inútiles y obliga a tener que agacharse o elevarse constantemente para hacer uso de elementos mal situados; en la cocina moderna todo está dispuesto a la altura conveniente y se organiza para economizar el esfuerzo y crear una mayor libertad de movimientos.
La cortina mínima es la que se limita a cubrir la ventana rebasando 15 cm de la altura del dintel para que no se vea el herraje desde afuera; 20 cm abajo del antepecho, para ocultar la bastilla; y 15 cm de margen de cada lado sobre los laterales del muro, para evitar el paso de la luz.
La cortina máxima es la que cubre toda la pared- independientemente de las medidas de la ventana-de muro a muro y de piso a techo, dejando únicamente 2.5 cm arriba y 2.5 cm abajo, para evitar roces.
En las fórmulas ilustradas se ha tomado como base el pliegue francés para calcular el metraje necesario de tela.
El espacio se multiplica por dos y se agregan 5 cm si es panel (2.5 cm para cada dobladillo lateral), y 25 cm si es par (10 cm para cada dobladillo y 15 cm para el cruce).
El total se divide entre el ancho de la tela para obtener el número de lienzos. Al alto del espacio se le aumentan 40 cm (30 cm para la bastilla y 10 cm para la cabeza).
Si la tela tiene dibujo, se agregará también la medida del alto del dibujo para que «case» y no quede cortado. El resultado anterior se multiplica por el número de lienzos, .y así se obtiene la medida de la tela que se necesita.
Fuente: Apuntes de Confección de blancos y tapicería de la Unideg