Relación entre la elasticidad de precio y el ingreso
La importancia del concepto de elasticidad de precio radica en que proporciona una útil medida sumaria del efecto que tendrá un cambio de precio sobre los ingresos.
Dependiendo del grado de elasticidad de precio, un cambio dado en el precio producirá un incremento, un decremento, o ningún cambio en el ingreso total.
Si se tiene una buena estimación de la elasticidad de precio, puede evaluarse en forma exacta el nuevo ingreso total que resultará de un cambio en precio.
Demanda elástica, unitaria e inelástica. La elasticidad de precio de la mayoría de los productos tiene una variación de 0 a aproximadamente -10.
Sin embargo, para propósitos de toma de decisiones, se han especificado tres límites específicos.
Multiplicando por -1 para cambiar su signo, dichas variaciones pueden denotarse tal como se muestra a continuación:
Considérese primero la elasticidad unitaria, situación en la que el cambio porcentual en la cantidad dividido entre el cambio porcentual en el precio es igual a -1.
Puesto que el precio y la cantidad se encuentran inversamente relacionados, una elasticidad de precio de -1 significa que el efecto sobre los ingresos provenientes de un cambio en el precio queda compensado en forma exacta por el cambio en la cantidad demandada, con el resultado de que el ingreso total, el producto que resulta de multiplicar el precio por la cantidad, permanece constante.
Si la demanda es elástica el cambio relativo en la cantidad es mayor que el del precio, por lo que un incremento porcentual dado en el precio causa que la demanda disminuya en un porcentaje más alto, produciendo un decremento en el ingreso total.
En consecuencia, si la demanda es elástica, un incremento en precio disminuirá el ingreso total.
Por último, si la demanda es inelástica, un incremento en precio producirá un decremento menos que proporcional en la demanda y por lo tanto el ingreso total aumentará. Estas relaciones se resumen a continuación:
Casos limitantes. La elasticidad de precio puede oscilar entre 0 (inelasticidad total) y Q* (elasticidad perfecta).
Como ilustración, considérese primero el caso en que la cantidad demandada es independiente del precio, y que por lo tanto alguna cantidad fija, Q*, será demandada independientemente del precio.
Las propiedades económicas de estos casos limitante s deben ser comprendidas. Una empresa que se enfrenta a una curva de demanda perfectamente inelástica, de naturaleza vertical, podría cargar cualquier precio y aún vender Q* unidades.
En consecuencia, podría explotar al mercado y, teóricamente, apoderarse de los ingresos y de la riqueza de todos sus clientes.
A la inversa, una empresa que se enfrente a una curva de demanda perfectamente elástica, de naturaleza horizontal, podrá vender una cantidad ilimitada de producción al precio P*, pero perdería toda su demanda si elevara el precio aun en una cantidad pequeña.
Ninguna de estas condiciones se mantiene en la realidad, pero las empresas monopolistas que venden satisfactores (por ejemplo, compañías que surten aguas urbanas) tienen curvas de demanda relativamente inelásticas, en tanto que las empresas que se encuentran en industrias altamente competitivas (por ejemplo la producción de grano) se enfrentan a curvas de demanda elásticas.
Fuente: Apuntes de Economía administrativa de la Unideg