Poder de resolución
En el caso de un telescopio, se llama «poder de resolución» a la distancia angular mínima a la que dos cuerpos celestes lejanos, o bien dos elementos geográficos sobre la superficie de un planeta, pueden distinguirse uno del otro. Cuanto mayor sea el diámetro del objetivo en un telescopio, tanto mayor será su poder de resolución.
Para calcular el poder de resolución de un objetivo se aplica la fórmula empírica establecida por el astrónomo W. R. Dawes, que consiste en una simple división del número fijo 115 por el diámetro del objetivo expresado en milímetros.
Un ejemplo: si se observa la estrella Castor de la constelación de Géminis con un refractor de 25 mm., aparecerá como una sola; en cambio, si se observa con uno de 150 mm., se presentará doble.
Dado que las dos componentes de la estrella se encuentran a 3″,9 de distancia angular, es evidente que el primer instrumento tiene un poder de resolución inferior y no es capaz de diferenciarla como dos puntos distintos (en el primer caso el poder de resolución es de 115: 25 = 4″,6); pero el segundo tiene un poder de resolución ampliamente superior al necesario, y distingue sin dificultades las dos estrellas.