Tratamientos superficiales especiales
Estos tienen el fin de evitar la corrosión por esfuerzo. Esos tratamientos deben incluir operaciones de nitruración y trabajos en frío, como el martillado o el laminado en frío. Se producen así esfuerzos residuales y superficiales de compresión, que deben vencerse antes de que pueda producirse una corrosión.
Protección catódica
Se logra cuando una estructura metálica que normalm ente sería atacada, se hace catódica, haciendo pasar por ella una corriente inversa. La electricidad puede provenir de cualquier fuente de cd, como un generador, un rectificador o una celda galvánica.
Los principios de la protección catódica se aplican a las estructuras subterráneas, tales como tuberías, tanques de almacenamiento y cimientos estructurales.
La protección catódica se usa también para protegerlas superficies internas de los depósitos de almacenamiento de agua y los condensadores.
Muchos calentadores domésticos de agua van equipados con varillas consumibles de magnesio o cinc, suspendidas en el depósito. Estos metales se disuelven selectivamente, proporcionando protección para cualquier superficie expuesta de acero.
La prevención de la corrosión de los cascos, el timón, las hélices y los cigüeñales de osl barcos, se lleva a cabo por medio de ánodos de cinc o magnesio que se colocan en el casco, cerca de los tornillos. Sin esos ánodos, las porciones de acero del barco serían anódicas con respecto a los tornillos de latón.
La fijación de los ánodos hace que el acero sea catódico, lo cual le da protección. Asimismo, se logran protección del casco mediante la utilización de fuentes apropiadas de cd.
Se usa el aire acondicionado para retrasar o evitar la corrosión. El aire acondicionado se hizo popular para proteger los barcos «mothballed», después de la Segunda Guerra Mundial y la Guerra de Corea.
Esta técnica de preservación implica el sellado de los espacios que contienen el equipo que debe protegerse, seguido por la eliminación de la mayor parte de la humedad del aire.
Este método es eficaz, debido a que el aire seco, a las temperaturas atmosféricas, no provoca la corrosión de los metales y las aleaciones estructurales comunes.
Fuente: Apuntes de Ciencia de materiales de la UNIDEG