Texturas cepilladas
Las características de estas texturas dotan de superficies antirresbalantes, de fácil ejecución.
Para ejecutar el cepillado, la superficie de concreto estará previamente acabada con llana.
La textura gruesa se ejecuta por medio de cepillos de cerdas rígidas sobre concreto nuevo, acabado con llana.
Las texturas de calidad media a fina se obtienen con cepillos de cerdas blandas sobre superficies tratadas con llanas de acero o metálicas.
Para mejores resultados, el cepillo debe ser enjuagado en agua después de cada pasada, y hay que darle unos golpecitos para quitarle el exceso de agua.
Dentro de este método entra el uso de la escoba (escobillado).
Las texturas cepilladas pueden diseñarse de varias maneras: líneas rectas, curvas, onduladas o dientes de sierra. Si se agrega color se enriquece el efecto visual.
Fuente: Manual de autoconstrucción, manos a la obra de IMCYC