Los problemas con el personaje
Al crear un personaje, resulta un punto de partida muy útil, tener en cuenta las transformaciones que va a sufrir a lo largo de nuestra historia. Comencemos entonces definiendo los rasgos y características que necesita el personaje para lograr su objetivo, para corroborar la premisa.
Establecemos entonces cuáles características posee al comienzo y cuáles se incorporarán a medida que la historia transcurra. Determinemos entonces: ¿Cómo incorporará nuestro personaje estos cambios? ¿Cuáles serán producto de la historia y cuales serán producidos por su interacción con los otros personajes?
Fuente: Apuntes de Animación Bidimensional de la U de Londres