Riego en la producción de lombrices
La humedad de los canteros y canoas se obtiene con el regadío, aunque si no se dispone de él se puede garantizar mediante manguera, regadera, etc.
El regadío idóneo para este cultivo es el microaspersor, ya que brinda una gota fina, que crea un microclima húmedo sobre el cantero, favoreciendo la humedad del mismo.
El regadío de las lombrices debe garantizar alrededor de 80 % de humedad. Este punto óptimo se puede determinar mediante los métodos convencionales para humedad del suelo que se aplican actualmente.
El regadío además de brindar la humedad requerida por la lombriz en su desarrollo, ejerce un efecto beneficioso sobre la temperatura, sobre todo en los meses de intenso calor, por lo que se recomienda en lugar de uno o dos riegos largos, aplicar varios durante el día de corta duración para alargar su efecto reductor sobre la temperatura.
Otros tipos de regadíos pueden utilizarse, aunque no con óptimos resultados como los que brinda la microaspersión; la manguera perforadora y el «spring«. Con la manguera perforadora se obtiene también una gota pequeña y ahorro de agua con el microaspersor, no así con el spring, cuya gota mas gorda compacta el cantero haciendo mas difícil el trabajo de la lombriz. No obstante si no se dispone de los dos métodos de regadío descritos anteriormente, el spring puede utilizarse.
Cuando no se dispone de sistema de regadío y solamente se dispone de mangueras o regaderas, debe tenerse el cuidado en la uniformidad del riego. A veces la cobertura utilizada para la protección del cantero contra la evaporación como son sacos de yute, guano, etc. impiden que el agua del regadío llegue al cantero uniformemente. Por ejemplo cuando se utiliza el guano el agua corre por las hojas y desviándose la misma fuera del cantero. En estos casos es recomendable retirarlo antes del riego y colocarlo nuevamente una vez terminado.
Si se riega con manguera debe afinarse la punta mediante la precisión de la misma para favorecer la formación de gotas pequeñas por las causas ya explicadas.
Fuente: Manual para la producción de abonos orgánicos en la agricultura urbana – Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).